El bicentenario es la conmemoración de los 200 años de nuestra proclamada independencia Colombiana. Es un hecho muy importante ya que de alguna u otra forma todos nos vemos involucrados en ella y por lo tanto estamos obligados a participar de esta.
Con la independencia dimos a conocer nuestro poder de nación y nuestro compromiso con ella, luchando día a día por lo que era nuestro hasta conseguir la victoria que tanto anhelabamos y que afortunadamente ahora tenemos.
Existen muchos hechos importantes en Colombia, pero ninguno tan conmemorado y recordado como el de la independencia, en ella participaron muchisimos héroes que recordaremos siempre, por el simple hecho de habernos regalado la libertad.
Hablamos de los héroes quienes fueron muy importantes, pero por qué no hablar de las mujeres que dejaron huellas inolvidables en nuestra historia. 
Veamos un poco acerca de ellas. Nuestros antepasados la consideraban inferior al hombre y nosotros la consideramos igual… Unos y otros estamos grandemente equivocados, porque la mujer es muy superior… Dios la ha dotado de gran perspicacia y sensibilidad y ha puesto en su corazón fibras y delicadísimas, cuerdas muy sensibles a todo lo noble y elevado. El patriotismo, la admiración y el amor, hacen vibrar esas cuerdas, y de ahí resultan la caridad, la abnegación y el sacrificio”.
Las mujeres lucharon contra la tiranía y dejaron una hoja de servicios heroicos; ya con el casco guerrero y empuñando las armas en defensa de la patria oprimida; ya sirviendo de acicate para retemplar la energía y pujanza de nuestros bravos patriotas; en ocasiones suministrando su asistencia a los enfermos en el campo de batalla, curando heridos, mitigando la sed al soldado fatigado, acompañando a los cadáveres hasta su sepultura y entregando su vida en el patíbulo bajo el plomo del verdugo
